lunes, 5 de marzo de 2012

Hotel Alé Alé: El último de Mar del Sud.

En el año 1988 Carlos Clavero le compra un terreno a Pedro Blanco en la calle 98 entre 15 y 17. Clavero había  notado, en sus años de veraneo, que los hoteles de Mar del Sud  que estaban funcionando en esa época no daban abasto. Veraneaba desde el año 1943, también sobre la calle 98, y siempre había soñado con emprender algo en Mar del Sud.








A la derecha: Carlos Clavero quien en el futuro sería el primer propietario del Hotel Alé-Alé. Mar del Sud 1944. Frente del Hotel Boulevard Atlantico. 

El hotel se construye rápido y para la temporada 89-90 ya está a punto. Clavero decide ponerle Alé-Alé debido a su trayectoria personal en el rugby y escuchar, cuando jugaba contra equipos franceses vistiendo la camiseta de Hindú,  la palabra alé, alé constantemente (En francés alé, alé significa vamos, vamos).






Frente del Hotel Alé-Alé. Verano de 1992. A la derecha Mabel Carrero quien fuera propietaria junto con Carlos Clavero durante los años 90






Plano original de Hotel Alé-Alé con sus ocho habitaciones.

Las primeras temporadas fueron un éxito. Con sus ocho habitaciones y su gran salón de grandes ventanales, se hospedan gran cantidad de turistas. Entre ellos podemos recordar a: Nito Mestre, el grupo de música La Portuaria, Lito Nebia, Cecilia Roth, Soledad Villamil y otros. Durante el invierno de 1990 estuvo abierto y tuvo la suerte de poder hospedar a una expedición francesa esponsorizada por el Banco Francés que recorría en catamarán el mundo. Estuvieron unos días esperando que mejore el tiempo, se subieron a sus catamaranes que habían dejado en la playa del Chino y se fueron a dar la vuelta al mundo.






Hotel Alé-Alé. Nevada del invierno de 1991.


En el año 1993, Clavero vende el hotel a la familia Núñez Navarro. El salón del hotel es ampliado y el color blanco de su frente es pintado de otros colores con los años. En su jardín frontal crecen plantas y su fachada va tomando otro estilo.

La boya de Centinela del Mar

La zona entre Mar del Sud y Centinela del Mar es muy conocida por la cantidad de naufragios ocurridos durante muchos años. Gran cantidad de estos trágicos naufragios ocurrieron ya hace más de cien años. El fuerte oleaje y la geografía del fondo marino hacen que muchos barcos, como si fuera una trampa, sucumban en esa zona.
En los años 70 se soltó una bolla de marcación del puerto de Necochea. Esta boya de casi una decena de metros de largo llegó flotando hasta las playas de Centinela del Mar después de atravesar una tormenta. Durante mucho tiempo estuvo en la playa siendo un atractivo para los pocos turistas que pasaban por la zona. Los años la fueron corroyendo y la arena se encargó de hacer el resto. Hoy, cuando sopla mucho el viento, se destapa lo que algún día marcó el paso de muchos barcos en la desembocadura del Río Quequén. 







La boya de Centinela de Mar años 70. Fue utilizada para marcar en el puerto de Necochea.






La boya de Centinela del Mar hoy. Verano del 2012.


Texto: Laureano Clavero
Imagen de archivo: Archivo Mónica Aramendi
Fotografía: Miguel Di Carlo


Otras notas relacionadas con naufragios:



domingo, 4 de marzo de 2012

Historia de las casas de Mar del Sud. El Molino: Entre Italia, la guerra en China y Mar del Sud.

A finales de los años 30 el señor Antonino Actis, más conocido como “Don Nino”, aparece junto al farmacéutico Pedro Busi en Mar del Sud. Venían por la playa desde Miramar en una especie de arenero de la época. El objetivo era encontrar unos lotes en Mar del Sud para construir una casa de veraneo. Tanto “Don Nino” como Pedro Busi comenzaron a caminar por lo que en ese momento era Mar del Sud. “Don Nino” divisa unos teros sobre una lomada y le dice a Busi: “Acá es el lugar. Aquí construiremos nuestras casas “.  Ese mismo año “Don Nino” comienza a construir su casa en lo que hoy es la esquina de la 19 y 98. ¿Por qué decide construir sobre el nido de los teros? Los teros hacen sus nidos sobre zonas elevadas y lo más importante: En lugares no inundables. “Don Nino” era ingeniero militar y una persona muy capaz. A la casa le puso el nombre de “El Molino”.







Cartel con el nombre de la casa. Mar del Sud. 2011.

¿Quién era “Don Nino”?

“Don Nino” era de origen italiano (algunos dicen que tal vez de la alta Italia, otros que era Romano), había partido de Italia muy joven para buscar un futuro mejor en Argentina. Trabajó muchos años en los ferrocarriles. Formado como ingeniero militar en Italia mostraba una gran capacidad para reemplazar repuestos de trenes y vías. Muchas veces cuando los repuestos no llegaban desde Inglaterra, él los hacía de madera.




A la derecha: Antonino Actis año 1951. Junto a él: Doña Rina (su mujer) y su nieta Licia. Frente original del Molino. 


“Don Nino” Actis había participado en la guerra que se denominó “La rebelión de los Boxers”. Tal vez muchos recuerden este episodio histórico por la película los 51 días d e Pekín en la que actúa Charlton Heston. Esto había ocurrido en 1899 en China, cuando los chinos se revelan ante la brutal y abusiva ocupación de ocho países (Japón, Rusia, Reino Unido, Francia, Estados Unidos, Alemania, Italia y el Imperio Austro-Húngaro). “Don Nino” había desembarcado en China y había sido herido en el cuello por metralla de cañón. Recordaba que los cañones con que tiraban los chinos eran de madera. Estas historias “Don Nino” la contaba cada vez que algún niño veraneante de Mar del Sud le preguntaba ¿Qué son esos agujeros que tiene usted en el cuello? Y el decía: Filiolo… (Niño en italiano) y comenzaba a explicar la historia.







Imágen ilustrada de la Rebelión de los Boxers en la cual participó Antonino Actis en 1899.

La casa El Molino: Todo un bunker.

Una de las cosas que más se comentaba entre los vecinos que conocieron a “Don Nino” Actis, es que su casa se había hecho semejante a bunker de guerra. Las paredes están rellenas con cemento mezclado con clavos y vigas con hierros, atraviesan toda la estructura. Los actuales propietarios de la casa dicen que cuando hicieron las ampliaciones fue muy costoso derribar las paredes y agrandar las ventanas debido a que estas estaban llenas de hierros y clavos retorcidos. Sabiendo que “Don Nino” era ingeniero militar y probablemente constructor de búnkeres durante la guerra, no asombra pensar que hizo El Molino con las técnicas y los conocimientos utilizados en la construcción de estructuras de protección militar.







Casa El Molino hoy. Invierno 2011. Mar del Sud.


El nombre de la casa se debe a un gran Molino que había en la parte trasera de la casa para extraer agua. Hace unos pocos años atrás quedó destruido por una tormenta y hubo que retirarlo. La casa actual fue ampliada pero muchas partes de esta aún siguen siendo las originales. En el año 1962, ya “Don Nino” muy anciano, se vende la casa a la familia Vega que actualmente pasa sus veranos ahí. El Molino es una muestra más de que las casas de Mar del Sud no son solamente estructuras de cemento y chapa sino que dentro de estas hay historias, recuerdos y momentos que quedarán para toda la vida en nuestro patrimonio.

Texto y fotografías: Laureano Clavero.
Foto de archivo: Revista Mar del Sud 1951. del archivo de Mónica Aramendi.




Para saber más:

http://es.wikipedia.org/wiki/55_d%C3%ADas_en_Pek%C3%ADn
http://es.wikipedia.org/wiki/Levantamiento_de_los_b%C3%B3xers


sábado, 3 de marzo de 2012

La historia de las calesitas de Mar del Sud. Parte 1

La primera calesita que se instaló en Argentina fue en el año 1867 entre lo que hoy el Teatro Colón y Tribunales. Con el tiempo se fueron modernizando hasta llegar a nuestros días que aún siguen divirtiendo a los más chicos.

En Mar del Sud, la primera calesita se instaló a mediados de los años 50 en los que hoy es la esquina de la calle 21 y 104. El Sr. Lahourcade, propietario de la despensa "La Luján" (calle 21), armó él mismo una calesita con base cuadrada y varios juegos. El problema era como impulsarla. Lahourcade compró un caballo viejo que decían que no servia para nada y lo amarró al centro de la calesita. De esta manera la calesita comenzó a funcionar valiendo 50 centavos de la época dar unas vueltas en la misma. Con los años Lahourcade dedicó sus esfuerzos a la despensa y la calesita desapareció. Hoy, en el lugar donde estaba emplazada la calesita, hay una casa con un gran jardín y el ruido de los niños disfrutando de las vueltas de la calesita es reemplazado por el silbido del viento en la copa de los árboles.

Primera calesita de Mar del Sud. Finales de los 50. En el fondo el Sr. Lahourcade, a la izquierda el caballo que hacía mover la calesita. La niña del centro es su hija Mabel Lahourcade. Calle 21 y 104.

Esquina donde funcionaba la calesita de Lahourcade. Calle 21 y 104. Mer del Sud. Marzo 2012.

Texto y fotografía: Laureano Clavero

Imagen de archivo: Mabel Lahourcade

Para saber más acerca de las calesitas:

http://www.cecilgoitia.com.ar/lacalesita.htm

http://www.lascalesitas.com.ar/



Fotos de ayer: Esperando el colectivo en la 100 y la 19

Curiosa fotografía del año 87 en donde varias personas esperan el colectivo cuando aún la Avenida 100 no estaba asfaltada. A lo lejos y casi como un puntito se puede ver venir el antiguo colectivo. Al siguiente año la 100 fue asfaltada.


Esperando el colectivo. Febrero 1987. Mar del Sud. En la foto: Mónica Aramendi y otros.


La misma imágen 25 años después. Marzo 2012.

Foto y fotografía: Laureano Clavero
Imagen de archivo: Mónica Aramendi

Otras "Fotos de ayer" en este blog:





La Pensión Santa Teresita. El recuerdo de los veranos de la década del 50 en Mar del Sud

Hace un tiempo este blog comenzó un proyecto de reconstrucción de la historia de los diferentes hoteles y hospedajes de Mar del Sud. En este se incluiría información y fotos de aquellos edificios de ayer y de hoy que a lo largo de los años hospedaron a los diferentes turistas que llegaban a la villa. Hasta el momento se ha tratado todo lo referente al gigante Hotel Boulevard Atlántico y sus servicios a lo largo de los años. Pero hubo otros hospedajes que también hicieron a la historia hotelera de Mar del Sud.

Pensión Santa Teresita.

El auge y el crecimiento de Mar del Sud en los años 50, después de que los primeros turistas construyeran sus casas en la que hoy es la zona céntrica, hizo posible que muchos emprendedores comenzaran a inaugurar nuevos hospedajes. Así nació la Pensión Santa Teresita que debe su nombre a la iglesia que está en la zona y que lleva el mismo nombre. Su propietario era Alberto del Matto. Carlos Clavero recuerda: “Se hospedaban muchos obreros que trabajaban en las construcciones locales”. En la revista “Mar del Sud” del año 1952 aparece un anuncio con foto promocionando la pensión. Años más tarde, en los noventa, la compraría la famosa actriz argentina Alicia Bruzzo.
Hoy lo que fue dicha pensión es una casa particular que aún, sobre la calle 31 entre 100 y 102, mantiene parte de su estructura antigua como recuerdo de los veranos de los años 50.


Anuncio en la revista Mar del Sud del año 1952. Pensión Santa Teresita.



Lo fue la Pensión Santa Teresita hoy es una casa particular. Marzo 2012.

Texto y fotografía: Laureano Clavero
Material de archivo: Mónica Aramendi

Otras entradas relacionadas con los hoteles de Mar del Sud en este blog:





Para saber más:


Mar del Sud... tu lugar. Liliana Olivieri. Edit. Martín 2011.

jueves, 1 de marzo de 2012

Postales de antaño: El arroyo"La Tigra" hacia el oeste.

En otra entrada de este blog, de agosto del 2011, titulada Postales de antaño: El arroyo "La Tigra", habíamos mostrado una postal de 1971 en la que se veía la desembocadura del arroyo en lo que hoy es la playa principal. Curiosamente apareció otra postal del mismo año en la cual se ve el encuadre opuesto a dicha postal. En esta postal se puede apreciar la calle 15 y la ausencia del Puente de Sánchez. estas postales se vendían en el ramos generales "La Canoa", de Hipólito Sánchez. Una imagen más que nos traslada a un Mar del Sud desolado e infinito.


Postal en la cual se puede ver el arroyo "La Tigra" de este a oeste. Mar del Sud 1971.


El arroyo "La Tigra" de este a oeste hoy. Mar derl Sud. Oct. 2011.

Texto y fotografía: Laureano Clavero.
Postal: Archivo Flia. Aramendi.

Otras postales de antaño en este blog:




Para saber más sobre el arroyo "La Tigra":


Mar del Sud... tu lugar. Liliana Olivieri. Edit. Martín 2011.